20 abr 20202 Min. de lectura

SURYA NAMASKAR (Saludo al Sol)

El “Saludo al sol” (Surya Namaskar en sánscrito) es una de las secuencias de posturas de yoga más utilizadas en esta disciplina. Sūria (el dios del Sol), namah (reverencias postradas) y kāra: (realizar). El Saludo al Sol se practica desde hace miles de años en la India, a través de cantos, ofrendas y postraciones.

En la India era practicada de forma religiosa. Se realizaba por la mañana en el amanecer, de cara al sol naciente, para rezar al Dios del Sol ( el corazón físico y espiritual de nuestro mundo y el creador de toda la vida misma) y así recibir sus bendiciones.

Tal y como lo conocemos hoy en día surge en la primera mitad del s. XX de la mano de un político hindú llamado Bala Sahib.

Es en 1937 cuando la periodista Louise Morgan, admiradora de Bala Sahib, se encargó de redactar toda la secuencia de asanas que componen el saludo al sol, y de difundirlo a través del mundo occidental. El sol simboliza el camino hacia lo Divino como un espejo de nuestra propia Luz interior (nuestro Sol interior); es la puerta de entrada hacia la Divinidad, nuestra experiencia personal, es nuestro Ser Supremo, el Alma. El Saludo al Sol es la unión entre cuerpo, respiración, mente y alma con los poderes curativos y nutritivos del sol, que nos entrega una vida con serenidad y despertar interior. Hoy en día los practicantes la realizan para dar la bienvenida al día, como un calentamiento o como la práctica en sí misma. Hay diferentes tipos de Salud al sol, dependiendo del estilo de yoga que se practique hará que la secuencia sea más dinámica, como sería en Power Yoga, o más pausada como en Hatha Yoga. Desde a mediados del siglo XX se encuentran múltiples versiones del Saludo al Sol, entre los más comunes son:

Saludo al sol A: es la forma de saludo al sol realizado en Ashtanga yoga, una modalidad de yoga muy dinámica en la que se busca la fluidez. Es un saludo al sol muy potente que requiere mucha energía.
Saludo al sol B: se trata del otro saludo que se realiza en Ashtanga yoga, siendo también muy potente y que consta de un mayor número de asanas.
Saludo al sol C: es considerado el saludo al sol clásico o estándar, el cual es mucho más calmado y accesible para practicantes principiantes. Lo forman 7 asanas, y de estas 7 se van a repetir 5 hasta llegar a los 12 movimientos. En la secuencia Ashtanga Vinyasa Yoga, uno de los propósitos principales de Surya Namaskara es despertar la energía del Sol Interior, que se encuentra en nuestro centro del ombligo. A medida que fluimos practicando esta secuencia, la liberación de la energía hace calentar nuestro cuerpo, energizar el sistema nervioso, avivar el fuego digestivo y equilibrar nuestro estado mental y emocional, dejándonos sintiéndonos tranquilos, calmados, centrados, enfocados en el presente y en la respiración junto con el movimiento.